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martes, septiembre 13

Fresquecito como la historia




La historia suele referirse a acontecimientos casi olvidados en el tiempo, sin embargo, conserva la frescura. Sobre todo cuando encontramos a quienes escriben acerca de cómo se ha escrito la historia. En
este caso, el tema gira en torno a esta última modalidad de tratar a los hechos pretéritos, pero  también resulta novedoso porque me refiero a un libro a punto de salir.
Se trata de Derroteros historiográficos cubanos, que en poco tiempo romperá la virginidad de sus páginas con la mirada del lector, en virtud de la labor de Ediciones Holguín. Tengo la suerte de ser uno de sus autores.

La historia del libro
Entre el 12 y el 14 de noviembre de 2014 tuvo lugar el II Taller de Historiografía desarrollado en Holguín bajo el auspicio de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC),
la Universidad de Holguín y la Unión de Historiadores de Cuba (UNHIC), dedicado al desaparecido historiador Rigoberto Segreo Ricardo.
Los propósitos del Taller, a lo largo de sus tres ediciones, han sido debatir los problemas teórico-metodológicos de la ciencia histórica y su estado actual en Cuba, asumir la historiografía como método en función de la teoría de la historia y no sólo como conjunto de textos sobre la materia y contribuir a la relevancia que ha cobrado la historiografía como componente de la historia
El libro es una compilación de doce ponencias presentadas en ese Taller para propender a la socialización del conocimiento, el intercambio de ideas y estimular la investigación y el debate acerca de tan importante disciplina de la historia.
Versiones de la historia cubana que aborda
Diversas interpretaciones de la historia del país tienen presencia en el volumen, desde la época colonial hasta la actualidad. Los trabajos analizan tanto la historia social como la referente al pensamiento político y filosófico, también están presentes el cine y la literatura de ficción como divulgadores de la historia.
La entrega parte del ámbitolocal y regional y se extiende a la historia nacional. Desde una perspectiva de futuro, las próximas convocatorias atraparán los problemas historiográficos en su universalidad.
Los títulos de las ponencias ilustran por si solos:
·        Las concepciones historiográficas de Rigoberto Segreo sobre los estudios de pensamiento cubano
·        La historiografía cubana como prólogo a la Revolución (1935-1958)
·        Sobre relatos en la Historia, la Literatura y el Cine. (Provocaciones para un coloquio memorable)
·        Corsarios Insurgentes. Una visión historiográfica desde Cuba
·        Notas críticas sobre  las mediaciones entre la filosofía martiana, su tradición exegética y el marxismo dogmático  durante la contemporaneidad reciente
·        Notas para la construcción de una historiografía sobre el federalismo en Cuba
·        Ciencias Sociales y perspectiva historiográfica de la historia social en el ámbito regional
·        La United Fruit Company y la inmigración antillana en la historiografía cubana
·        Apuntes historiográficos sobre  marginación y marginalidad
·        Requerimientos metodológicos para la elaboración de estudios históricos de localidades rurales en el periodo de la Revolución en el poder
·        Un caso de historia social
·        Un acercamiento al testimonio holguinero (1986-2011)
Mi visión de la historia en el libro
Mi trabajo Las concepciones historiográficas de Rigoberto Segreo sobre los estudios de pensamiento cubano encabeza la entrega. Es un modesto homenaje al amigo y colega Segreo, cuyo sueño de escribir una historia del pensamiento cubano quedó trunco.
Segreo sistematizó diez problemas que presentan los estudios de historia del pensamiento cubano. A partir de ellos propuso los principios metodológicos que permitirían sacar, de la situación descrita, a los estudios de historia de la temática que se realizarán También formuló una periodización que puede arrojar jugosos frutos.
Estas son primicias sobre el volumen, ahora esperemos por el lanzamiento de ese libro sobre la historiografía como parte de la historia.

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